Vergüenza ajena
Vergüenza ajena
Esta mañana he sentido
un brote de compasión
al ver a un hombre buscando
algo en un contenedor.
Yo sentí vergüenza ajena
por esta sociedad nuestra
que no es capaz de evitar
que exista tanta pobreza.
De verdad me causa pena
este mundo que habitamos
dónde hay personas que buscan
lo que otros desechamos
Y mucho más si se trata
de rebuscar alimentos
para qué digieran algo
sus hijos que están hambrientos.
Buscando algo de comer
lo que otros han desechado
porque han pasado de fecha
o no les haya gustado.
Todos estamos pensando
en qué si nos toca un premio
compraremos un coche nuevo
más grande que el que tenemos.
O comprarnos una casa
en una playa lujosa
pero el pobre que rebusca
está pensando otra cosa.
Piensa que si alguien quisiera
darle un puesto de trabajo
las ilusiones que tiene
no se le vendrían abajo.
Estas ilusiones son
ver a sus hijos contentos
sin pasar calamidades,
ni pena mi sufrimiento.
Que coman todos los días
y que puedan estudiar
y el día de mañana puedan
ayudar a los demás
Comentarios
Publicar un comentario